Vie. Abr 26th, 2024

La 29ª edición, que se celebrará del 1 al 5 de febrero, sigue teniendo como objetivo popularizar la música clásica.

Conciertos breves y eclécticos a precios asequibles: a partir del miércoles, la Folle Journée de Nantes contribuye a hacer accesible la música clásica al mayor número de personas posible, abordando el tema de la noche en su 29ª edición. «Quería un tema transversal, que pudiera reunir a todos los públicos», explica René Martin, director artístico de las Créa Folles Journées, sobre esta «Oda a la noche» que durará del 1 al 5 de febrero.

Hacia medianoche
Entre los cerca de 270 conciertos que se celebrarán en Nantes sobre este tema, algunos tendrán lugar a horas poco habituales. Por ejemplo, a las 7:30 de la mañana se pueden escuchar «lecciones de oscuridad» de música barroca. En aquella época, «había un poco de teatralidad que recrearemos en Nantes. Tenías doce velas. Cuando cantábamos las lecciones de oscuridad, apagábamos una vela tras otra», explica René Martin. A última hora de la tarde, hacia medianoche, el programa incluye un espectáculo titulado Round Midnight (Medianoche redonda), en referencia a la obra del artista de jazz estadounidense Thelonious Monk.

El tema de la noche también nos permitirá descubrir «Serenatas», que históricamente se tocaban por la noche al aire libre, canciones de cuna como la famosa nana de Brahms, y también muchos artistas del extranjero. El músico indio Debashish Bhattacharya presentará «ragas nocturnos», «una música extremadamente culta, una música muy estructurada», subraya René Martin.

«La música es algo que hay que compartir
Desde la creación del festival en 1995, el objetivo ha sido democratizar el acceso a la música clásica, con nuevas iniciativas cada año, como ofrecer conciertos por toda la región de Pays de la Loire, retransmitir actuaciones en Arte y France Musique, o hacer que los artistas toquen en un piano vertical dentro de un tren tranvía de Nantes. Pero los dos aspectos esenciales de este planteamiento siguen siendo los mismos: conciertos de 45 minutos, vendidos a una media de 13 euros por asiento.

«Cuando creé el concepto, me dije: ‘si quiero dirigirme a un público muy, muy numeroso, los conciertos deben ser absolutamente cortos’. Porque si entras en una sala de conciertos y el concierto dura una hora y media, dos horas, si no estás acostumbrado, vas a abandonar y eso es terrible porque te dices a ti mismo: ‘esto no es para mí'», explica René Martin.

En 2023, el festival pone en marcha por primera vez un «pro day» para directores de teatro y otros profesionales, que podrán detectar artistas entre los 1900 participantes, con el fin de programarlos posteriormente.

El festival espera vender unas 200.000 entradas para todos los espectáculos de Nantes y la región, tras dos años, 2021 y 2022, marcados por las dificultades vinculadas a Covid-19.