El panorama audiovisual global se nutre cada vez más de talentos provenientes de mercados como el turco y el indio. Mientras las series otomanas arrasan en España a través de canales temáticos como Nova y Divinity, las figuras emergentes de la ficción india captan la atención internacional. Analizamos las trayectorias de dos de estos fenómenos: el actor turco Burak Deniz, que ya desbanca a Can Yaman, y la estrella india Jaideep Ahlawat, cuyo viaje es una lección de vida.

Burak Deniz, la nueva sensación de la ficción turca

La fiebre por los dramas turcos en nuestro país encumbró a actores como Can Yaman, impulsado por éxitos como Kara Sevda o Erkenci Kuş. Sin embargo, la industria del entretenimiento renueva constantemente a sus estrellas. Hoy, el nuevo ídolo de las audiencias es Burak Deniz, quien ha consolidado su salto a la fama con series que se estrenaron originalmente entre 2016 y 2017. Deniz fue el protagonista de Nuestra historia, uno de los títulos más vistos en Divinity en 2021, y actualmente es una de las celebridades más cotizadas de Turquía. Nacido en 1991, el actor cuenta con una sólida formación académica: estudió primero Historia del Arte y, posteriormente, Sociología, aunque su verdadera vocación era la interpretación.

De la universidad a ‘influencer’ y actor internacional

A pesar de su formación universitaria, el camino de Deniz se dirigió rápidamente hacia la actuación. Comenzó con papeles menores, sin centrarse únicamente en las grandes producciones, e incluso participando en cine independiente. Su papel en Medcezir fue clave, atrayendo la atención de los productores, especialmente porque su popularidad crecía exponencialmente en redes sociales, donde se convirtió en un ‘influencer’ con millones de seguidores. Su carisma y talento le llevaron a trabajar con actrices de la talla de Hande Erçel (Love is in the air) y a ganar el prestigioso Premio GQ al Hombre del Año en 2018. Su carrera ya mira al exterior, habiendo participado en la miniserie italiana Le Fate Ignoranti, vendida a Disney+, y con planes de explorar más a fondo el terreno cinematográfico.

El doble filo de la fama y la privacidad

Con una base de seguidores en Instagram que supera los dos millones, Burak Deniz es un personaje de interés público en todos los países donde se emiten sus series. Pese a este foco mediático, el actor es reservado con su vida privada. Según ha reflejado en entrevistas, se encuentra soltero y prefiere las relaciones que se desarrollan lentamente, asegurando que prefiere dejar el drama exclusivamente para la ficción, ya que nunca ha tenido una relación sentimental tortuosa. No obstante, la fama también le ha pasado factura en forma de controversia. En 2020, se vio envuelto en un incidente al embestir a un motorista mientras conducía bajo los efectos del alcohol. Tras bajarse para asegurarse del estado del conductor, se dio a la fuga antes de la llegada policial. Aunque se enfrentaba a una petición de seis meses de prisión por el incidente, el juicio se saldó con una multa económica y la retirada del carné de conducir.

Jaideep Ahlawat: El viaje desde el campo a la alfombra roja

El actor indio Jaideep Ahlawat, conocido por sus roles en producciones aclamadas como Patal Lok o Jaane Jaan, personifica una transformación vital aún más drástica, que demuestra los extremos de la industria global. Su recorrido hasta consolidar su carrera en el entretenimiento ha sido tan extenso que, en sus propias palabras, «tengo referencias para todo». En una reciente reflexión, Ahlawat destacó el inmenso arco de su vida, pasando de una infancia despreocupada en el pueblo a la vida de lujo en Bombay. “La vida en el pueblo era maravillosa, distinta, pero no difícil. No había nadie para juzgarte. Pero el cambio es inmenso, el arco es demasiado grande. Lo he visto todo, desde recoger estiércol de vaca hasta ir de fiesta en la azotea de un hotel de siete estrellas”, confesó el actor.

Las «referencias fuertes» que forjan a un actor

Para Ahlawat, esta trayectoria no solo es un contraste social, sino una valiosa herramienta profesional. La diversidad de sus experiencias, que incluyen vivir en un pueblo, luego en Rohtak, Pune y finalmente en Mumbai, le ha dotado de un conocimiento profundo de diferentes culturas y clases sociales. Utiliza como ejemplo la anécdota de su niñez: “Aprendí a nadar agarrándome a la cola de una vaca; es una referencia que tengo. Pero también he vivido en un auténtico palacio. Mis referencias son muy fuertes”.

Además, en una aparición televisiva, rememoró sus inicios en Mumbai, donde él y hasta cinco compañeros más compartían un pequeño apartamento de una sola habitación. Pese a las estrecheces —llegaban a dormir todos juntos en el salón y la cocina, ya que el dormitorio estaba lleno de ropa—, el actor recuerda esos días con alegría, subrayando que en aquel ambiente «no había espacio para la tristeza». Las historias de Burak Deniz y Jaideep Ahlawat, aunque de países distintos, ilustran la dramática transformación y las complejas realidades de la celebridad en el panorama global actual.